Uno de esos viajes que siempre tienes pendiente hacer y es que… ¡Argentina es única!

Buenos Aires, la ciudad del tango

Muchos kilómetros por recorrer, más de 4000 km de norte a sur y paisajes tan diferentes como espectaculares. Quizás recorrerla de norte a sur si no tienes el tiempo suficiente es una auténtica locura, pero ¿por qué no? ¿Quién se atreve a decidir entre su preciosa capital, el fin del mundo, el perito moreno y las cataratas de Iguazú? Nosotros desde luego que no.

Después más de 13 horas de avión llegamos a Buenos Aires, y comenzaba la aventura.

Según ellos mismos dicen, la ciudad más europea de Sudamérica. Se respira fútbol, tango y más amabilidad de la que podíamos imaginar. Tomamos más dulce de leche que en toda nuestra vida junta y aún así nos pareció poco.

Sobre todo Buenos Aires es para vivirla, para conocer un poquito de su historia, de sus influencias y disfrutar de su increíble gastronomía. Puerto Madero y el Río de la Plata, el más ancho del mundo. La Plaza de Mayo con su Casa Rosada y el icónico obelisco. Recorrer sus distintos barrios Recoletas, Palermo, San Telmo y como no, el famoso barrio de La Boca.

Caminito Buenos Aires
LA BOCA

El barrio más colorido y pintoresco

El colorido de todo este barrio y en concreto de la turística calle Caminito, cuenta la historia de un barrio muy humilde en el que los inmigrantes, sobre todo italianos, se agrupaban en los llamados conventillos y los pintaban con las pinturas que sobraban a los barcos. Hoy esto se ha convertido en la una de las zonas más turísticas y con más reclamo de la ciudad, debido también en gran parte, al monumental estadio de la Bombonera.

Para terminar el día dos lugares de referencia donde cenar y disfrutar de su vida nocturna, en Puerto Madero o en Palermo Soho, la zona mas cool de la ciudad.

Después de unos días disfrutando de Buenos Aires y sus mosquitos, la llamada del «fin del mundo» nos esperaba, la ciudad más al sur del planeta (con permiso de un pequeño pueblo chileno con el que luchan desde hace años por el título).

Ushuaia, Tierra de fuego

Habíamos oído hablar de sus amaneceres, del parque nacional Tierra de fuego y de los pingüinos magallánicos que hace muy pocos años paseaban por la calles de Ushuaia, hasta que el crecimiento de la ciudad les hizo buscarse refugio en una pequeña isla llamada Isla Martillo. Esta isla privada hace que solo puedas pasear por ella y ver a los entrañables pingüinos desde cerca, con solo una de las empresas que te ofrecen esta actividad.

Allí te esperan 3 especies de pingüinos, los magallánicos, los papúa y 1 pareja de pingüino rey, el pingüino antártico por excelencia. Todos ellos tan divertidos y entrañables como esperábamos .

Pensábamos que caminar con los pingüinos, vivir la experiencia de estar en el fin del mundo y disfrutar de sus increíbles paisajes iba a ser lo mejor que nos íbamos a llevar de Ushuaia, hasta que llegó Laguna Esmeralda para dejarnos sin palabras.

Laguna Esmeralda

El camino no es fácil, hay zonas en las que se hace inevitable tener que meter el pie en el barro de manera literal, pero cuando por fin llegas a tu destino todo el barro del mundo ha merecido la pena. Uno de los paisajes más asombrosos que hemos visto, el color azul esmeralda del agua que da nombre a la laguna es absolutamente increíble. Toca seguir la ruta, dos sueños por cumplir nos esperan, pero estos días hay algo que ha cobrado más sentido que nunca: Contigo al fin del mundo!!!

El Calafate

Nuestra siguiente parada se trataba de un sueño por cumplir, conocer y pisar el Perito Moreno. Para ello El Calafate nos esperaba para sorprendernos, un pequeño pueblo en plena Patagonia Argentina lleno de vida desde donde partiríamos a nuestra ansiada visita al parque nacional de los glaciares. Después de Antártida y Groenlandia, la mayor reserva de agua dulce del mundo. Este parque está formado por varios glaciares (Perito Moreno, Viedma, Upsala, Spegazzini,…), nosotros decidimos conocer el emblemático Perito Moreno.

Como quien va camino de pisar la luna… así nos sentíamos nosotros dirigiéndonos a nuestra aventura. Nos acercábamos en barco a la inmensa pared de hielo de unos 70 metros de altura, como caminantes blancos al muro, la sensación es indescriptible. Verlo desde lejos, desde las pasarelas es muy hermoso e impactante, pero desde el barco es absolutamente espectacular. Allí nos esperaba nuestra caminata por el glaciar, no sin antes entender cómo ocurre algo tan asombroso.

El Perito Moreno visto desde la cara Sur
Trekking Perito Moreno - Entre las grietas

Después de esta tan interesante charla, casco y crampones colocados comenzaba nuestro minitrekking. El color de las grietas cuando por fin las nubes nos daban una tregua era de un azul brillante absolutamente precioso. A lo largo de todo el día en el parque, vimos nublarse, llover, diluviar y un sol espléndido, digno del verano en el que nos encontrábamos, algo muy típico del parque. Caminamos entre las grietas, coronamos una de las cimas del glaciar y por último, para terminar esta experiencia, brindamos con un whisky servido con hielo recién cogido del propio glaciar. Brindamos por estas experiencias únicas, que te ensanchan el alma y con las que puedes tocar la felicidad con los dedos. Sueño cumplido  ✅

Con el subidón de esta experiencia partíamos rumbo a Puerto Iguazú, casi 20ºC de diferencia nos esperaban, así que nada más llegar al aeropuerto, cambiamos los jerseys y las botas para ponernos nuestros pantalones cortos y comenzar esta nueva aventura.

Puerto Iguazú

El primer día en el Parque Nacional de Iguazú lo íbamos a pasar en el lado argentino y el segundo en el lado brasileiro, para admirarlas también desde el cielo.

Las Cataratas de Iguazú eran otro sueño por cumplir, una de las 7 maravillas naturales del mundo y es que da igual desde dónde las admires, tierra, agua o aire, que son verdaderamente increíbles, probablemente lo más espectacular que hayamos conocido hasta ahora.

Ese escalofrío qué sientes nada más pisar la pasarela final y llegar a la emblemática garganta del diablo, esa sensación de quedarte sin aliento y en mi caso, como no, esas lagrimas de felicidad recorriendo mi rostro, te hacen darte cuenta de inmediato de que estas viviendo algo irrepetible y que afortunados nos sentimos de haberlo vivido.

En cada paso del camino te encuentras con algo que admirar, pequeños y no tan pequeños saltos de agua, pero nada comparable con los 80 m de altura del principal, especies de animales que no estamos acostumbrados a ver, simpáticos coaties (menos cuando sacas comida, que en ese momento dejan de hacer tanta gracia… ), monitos caí, bellísimas mariposas de todos los colores y tamaños, arañas gigantescas con telas tejidas en color oro y como no el esperado tucán, y digo bien tucán, en singular, mi gran decepción,
pero cuando me propongo algo soy terriblemente concienzuda y no pensaba irme de allí sin verlo.

Y llegó el momento de nuestra gran aventura!!

Una lancha nos llevaba camino de admirar las cascadas desde el rio. Admirarlas desde abajo es otro autentico espectáculo. Nos avisaron que íbamos a mojarnos. Primero fue una pequeña toma de contacto, nos reíamos porque no era para tanto (ilusos), pero lo mejor estaba por llegar, como si de un parque de atracciones se tratara allí nos plantamos debajo del mismísimo salto San Martin, el resto es predecible.

Segunda experiencia increíble, para el recuerdo ✅

La casualidad hizo que ese mismo día saltara la noticia de un trafico accidente de helicóptero, las dudas se apoderaron de nosotros pero menos mal que la vida es para vivirla y allí estábamos a las 9 de la mañana para que desde el lado brasileiro contempláramos el espectáculo esta vez desde el aire.

Además de ser una sensación brutal, la belleza de las cataratas desde el cielo es increíble, es asombroso lo maravillosa que puede ser la naturaleza.

Nos vamos con una inmensa sensación de felicidad por lo afortunados que somos y todo lo que nos llevamos de este increíblemente perfecto viaje, con una promesa de volver a vivirlo juntos de nuevo. Si la promesa de la que Laguna Esmeralda fue testigo sale bien, volveremos siendo más, pero volveremos.

Gracias Argentina, un auténtico placer conocerte y disfrutarte!!!